El estudio geofísico utiliza técnicas avanzadas para "ver" debajo de la superficie de la Tierra y descubrir lo que hay oculto, incluidos los acuíferos y las capas de roca.
Los acuíferos son como gigantes almacenes de agua subterránea que pueden encontrarse a cientos de metros bajo tierra y que suministran agua a millones de personas en todo el mundo.
El agua subterránea es a menudo más limpia y natural que el agua superficial, ya que se filtra naturalmente a través de las capas de tierra y roca.